El dióxido de carbono, según expresan los científicos del gas, es más responsable del calentamiento global, volvió a conseguir niveles récord el mes pasado, informaron el martes los científicos.
Los niveles en el Edificio Mauna Loa de Hawaii intermediaron 410.8 partes por millón en mayo, superando otro hito climático.
Este nivel no se ha visto en la historia de la humanidad y asimismo es más alto que en cualquier momento en millones de años. La concentración de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera se desarrolla cada año, y la tasa de aumento se está precipitando, anunciaron científicos del Instituto Scripps de Oceanografía y de la Gestión Nacional Náutica y Atmosférica.
Esta es la cima estacional más penetrante examinada en 60 años de observaciones en la cumbre del volcán más amplio de Hawai, contiguo de grandes amplificaciones globales en las altas concentraciones de CO2 por siete años contiguo de grandes amplificaciones globales en las altas concentraciones de CO2.
La cifra máxima del año 2019 fue 3.8 partes por millón más penetrante que el superlativo de 411.3 ppm logrado en mayo del año 2018, Este es el segundo brinco anual más alto registrado. i bien 410 partes por millón puede no parecer una gran cantidad, los científicos han sabido durante décadas que inclusive pequeñas cantidades en la atmósfera consiguen elevar las temperaturas en todo el mundo. La planta de carbón Scherer, uno de los importantes emisores de dióxido de carbono de la nación, en Juliette, Georgia.
La quema de combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas redime gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono y el metano en la atmósfera terrestre y los océanos. Ese carbono suplementario ha hecho que las temperaturas aumenten a niveles en el último siglo y medio que no consiguen explicarse por factores naturales, dicen los científicos. En los últimos 20 años, la temperatura del mundo se ha extendido aproximadamente dos tercios del grado Fahrenheit, expresó NOAA.
Se han hecho numerosas propuestas para amortiguar el calentamiento global, pero sin una rápida baja de las emisiones de CO2 de los combustibles fósiles, son suficientemente inútiles.