Nos encontramos ante un panorama sin comparación en toda la historia del turismo en España. Los más de 68 millones de viajeros que han llegado el pasado año 2015 a nuestras costas ha llevado a numerosas agencias a tomar la determinación de elevar su nivel de servicios y su atención, pero lejos de aumentar los salarios y los empleos para todos los trabajadores del sector, lo que está sucediendo es justamente que los salarios están descendiendo, las condiciones laborales están empeorando y como producto de esto, nos estamos encontrando con que el aumento de turismo no está trayendo mayor riqueza al país. Es una tendencia más habitual de lo que se puede creer ya que, según las estadísticas mundiales de la OMT, existe una correlación entre los países más turísticos y los que se encuentran en peores condiciones económicas.
Aumento del turismo en España y desenso de los salarios y trabajadores fijos
Si bien es cierto que en los meses veraniegos de 2015 se generaron más de 200.000 puestos de trabajo, estos fueron destruidos con la llegada del mes de Septiembre. El resultado es, sin duda, alarmante para el trabajador. Es habitual que con la nueva ley laboral se halla promovido un tipo de empleo precario que va desde un día a un par de meses de duración.
Es por esta razón que no tenemos muy claro hasta qué punto se puede denominar a la situación actual, una buena opción para el trabajador del sector turístico. No son los únicos que se están encontrando diariamente con inconvenientes de toda índole sino que nos encontramos cara a cara con que el turismo en España está afectando, también a numerosas empresas pequeñas o medianas que no pueden competir con el monopolio de las grandes empresas.
La agencias de viajes y PYMES de turismo se abren paso a duras penas
En lo que va de año, el número de PYMES que ha dejado de existir ha aumentado drásticamente. Una de las razones principales a las que aluden muchas pequeñas empresas dedicadas al sector turístico, especialmente touroperadoras y agencias de viaje es el hecho de que tienen que competir contra una avalancha de impuestos similares a los que tienen que pagar empresas que facturan cientos de miles de euros por trimestre.
Si a esto le sumamos que las agencias de viajes y PYMES de este tipo suelen tener que pagar el impuesto de sociedades debido a que están constituidas como sociedades limitadas, nos encontramos con altas tasas a pagar para ingresos que no suelen superar los 100.000 euros anuales. Ante esto, el siguiente objetivo es llegar a un nexo de unión entre la cantidad de bienes que se están ingresando en turismo y que los servicios hosteleros y los salarios de los trabajadores y pequeños empresarios estén al nivel de un turismo que alcanza el cuarto lugar a nivel mundial.
