MADRID, 15 (SERVIMEDIA)
El ministro de Consumo, Alberto Garzón, consideró este miércoles que las medidas adoptadas hasta ahora por el Gobierno para contener el precio de la cesta de la compra son «buenas, pero insuficientes» y defendió que, por este motivo, «hay que ir más allá».
Así lo aseguró en declaraciones a los medios de comunicación posteriores a su intervención en el acto institucional ‘Derechos para crecer sanos y libres’ por el Día de la persona consumidora y en las que estimó que las medidas que el Ejecutivo «intentó aprobar en septiembre iban por la línea adecuada».
«Lo primero que tenemos que hacer a estas alturas es reconocer que las primeras medidas que intentamos aprobar en septiembre ya, Yolanda Díaz y yo, cuando nos reunimos con muchas empresas, iban por la línea adecuada, porque lo que estamos viendo con los índices de precios es sencillamente que muchas familias no se pueden permitir sostener a sus propios niños con una alimentación saludable», abundó, convencido de que «esto es el resultado de haber sacralizado el libre mercado».
En este punto, hizo hincapié en que el año pasado y este año las «grandes» distribuidoras del ámbito de la alimentación mantienen unos beneficios empresariales «absolutamente desproporcionados» y se están produciendo repartos de dividendos «absolutamente desproporcionados a unas pocas familias en el momento en el que suben los precios de manera disparada».
«El libre mercado está racionando la alimentación y está obligando a muchas familias a tener que cambiar sus cestas de consumo para intentar como sea llegar a fin de mes. Por lo tanto, las medidas que hemos aplicado hasta ahora está claro que son buenas pero insuficientes y hace falta ir más allá», insistió, para denunciar que «algunas» de las «barbaridades» que el Gobierno defendió «enfrentando la oposición de muchos actores que decían que era una barbaridad» han sido aprobadas «incluso en un país como Francia».
En paralelo, reiteró su convencimiento de que existe la «posibilidad» de articular «medidas alternativas, adicionales» para frenar la escalada de precios de la alimentación y, preguntado por un posible «tope» a la cesta de la compra, estimó que «hay diferentes medidas encima de la mesa, no solo hay una».
En este sentido, valoró que «algunas grandes empresas» con las que se reunió en septiembre junto a Yolanda Díaz «siguieron» sus «indicaciones porque sabían lo que estaba en juego». «Y demostraron con esas acciones que había espacio y margen para aplicar la congelación de precios de determinados productos básicos que salvarían, en gran medida, a muchas familias en este momento», sentenció.
No obstante, lamentó que «otras no quisieron hacerlo», al tiempo que subrayó que «son las que están ahora demostrando que existen unos beneficios empresariales muy elevados legítimos pero que chocan en este momento, lógicamente, con el sentido común». «Estos indicadores y la vida real nos demuestran que las medidas aprobadas hasta ahora han sido positivas pero que son insuficientes», concluyó.
