Uno de los rincones más bonitos y quizá desconocidos de la capital es el templo de Debod. La estructura, donada por Egipto en 1968 es uno de los templos más antiguos y mejor conservados del mundo y, al contrario que otros, se encuentra al aire y entrada libre.
sin embargo, este lugar lleva casi dos meses cerrado por el Ayuntamiento de MAdrid debido a las altas temperaturas que se registraron en su interior y que no son propicias para poder trabajar en sus salas, de visita recomendada y gratuita para todos sus visitantes. Cuando superaron los 27 grados centígrados, temperatura máxima permitida en los lugares de trabajo, hubo que tomar la decisión de echar el cierre.
Y así, transcurridos 60 días tras la clausura, nada ha pasado. Nada ha mejorado. Se supone que el problema viene por las máquinas de refrigeración, que dada su antigüedad no funcionan como deberían y no consiguen mantener las instalaciones en las temperaturas adecuadas que se situarían en el abanico de los 22-25 grados.
Pese a todo esto, se ha anunciado que el templo volverá a abrir sus puertas durante este mes de septiembre aunque, como aún no ha conseguido llegar a ese ámbito de temperatura, no se sabe a ciencia cierta qué día será.
Para tratar de conseguir aclimatar definitivamente este monumento, se van a instalar una serie de sondas para detectar cuáles serían las zonas que necesiten mejora de una forma mucho más urgente para conseguir que, finalmente, todo el complejo consiga la temperatura óptima tanto de conservación como de adecuación laboral.